(Chile) A un año del 18 de octubre seguimos propagando la insurrección anárquica contra el poder

La propagacion de la acción anarquica insurrecional, a modo de propuesta teorica y práctica de liberación sin lideres, jefes ni dirigentes, se ha propagado en Chile y el mundo como una praxis de acción ofensiva contra el estado y como forma de resistencia y ataque contra toda forma de autoridad.

En Chile, con el paso de los años, la tendencia anárquica insurreccional evidencia un planteamiento anárquico siempre en continuo avance. Previo a la revuelta masiva iniciada el 18 de octubre, en las calles existía ya una atmosfera de lucha: grupos minoritarios de acción, manifestaciones y jornadas de protesta que daban cuenta de un escenario siempre fértil para enfrentamientos y ataques a la dominación y los simbolos del capital.

Así, a lo largo de las décadas recientes se ha forjado una continuadad insurreccional desde diversas individualidades y grupos que apuestan por la lucha confrontacional, siempre desmarcándose de partidos y plataformas, avanzando sin tregua por la liberacion total, sin tranzar ni pactar con el poder y marcando una abierta distancia con el peticionismo conyuntural que siempre termina por ser sofocado cuando la protesta tiene limitantes reformistas que solo fortalecen la existencia del estado.

En la evolucion combativa del ciclo de lucha iniciado a mediados del 2000, la ofensiva anárquica ha ido generando a pulso su propia historia de lucha antiautoritaria, separada de la lógica jerárquica del partido, del etapismo del sindicato y del autoritarismo del grupo de vanguardia. Con aciertos y errores, lxs anarquícxs insurrectxs en este territorio hemos desarrollado nuestros propios planteamientos y elementos de lucha, tejiendo con un hilo negro nuestras dinámicas teóricas, valoricas y prácticas que nos conectan con otrxs hermanxs y cómplices en el mundo.

Hoy, en un contexto de una revuelta generalizada y amplia en sus matices, ideas y fines, seguimos propagando la anarquia aquí y ahora contra toda forma de autoridad, con el horizonte insurrecto apuntando siempre a intervenir en la realidad de manera multiforme y sin ambigüedades en la lucha contra el estado-carcel-capital.

Por todo esto, nos parece fundamental revitalizar la idea y acción antiautoritaria de la tendencia anárquica informal. La memoria es nuestra arma y nuestra propia experiencia es el terreno de experimentación para encender la mezcla incendiaria de nuestras certezas, apuestas y convicciones materializadas en la ofensiva contra toda forma de poder.

Profundizar nuestras raíces, preparar nuestro terreno, cuidar los nuevos brotes, endurecer nuestro tronco y extender nuestras ramas y hojas para que florezca la anarquía y la libertad atacando al dominio a pesar de su poder y de su control, saboteando su sistema y propagando la horizontalidad y las relaciones de afinidad lejos de cualquier intento ciudadano o izquierdista de cooptar la revuelta. Ese es el desafío que hoy asumimos en el actual escenario de lucha.

Por la conflictividad permanente con cualquier orden social.
Ni Estado ni ciudadanismo.
Ni dictadura ni democracia.
Contra todas las leyes y constituciones.
Solidaridad activa con lxs presxs en lucha.

POR LA LIBERACIÓN TOTAL
PROCURA QUE VIVA LA ANARQUÍA